Estuve en Venecia en el verano de 2013. No olía mal, aunque hacía calor. Preguntamos a algunos lugareños (con quienes nos quedamos) sobre el legendario olor.
Históricamente, las aguas residuales sin tratar eran simplemente vertidas en los canales y (eventualmente) llevadas al mar. Este había sido el status quo durante siglos, con algunas mejoras a lo largo de los años, pero todavía había muchas tuberías antiguas. Con el aumento de la población y el incremento del turismo, el problema de los olores empeoró con el paso de los años. Era particularmente malo en los días calurosos de verano.
Hace un tiempo (tal vez hace 10-20 años), la ciudad reconoció el olor como un problema y comenzó un programa para limpiarlo. Hicieron algunas cosas clave:
- Limpió el lodo y la mugre de los canales, restregando y dragando
- Requerido que la nueva plomería cumpla con las nuevas y estrictas normas
- Comenzó un esfuerzo de remediación de la plomería para arreglar toda la vieja plomería
Nuestros anfitriones tuvieron que reemplazar su antiguo sistema de tuberías de la casa por un sistema de triple fosa séptica unos años antes. El resultado general ha sido una dramática mejora del olor en toda la ciudad.
Así que mi experiencia (en los calurosos días de verano) es que Venecia huele muy bien ahora. Pero no siempre fue así.