Viajé a Japón hace unos 2 años. Me basé en mi guía y en las reseñas de internet para encontrar restaurantes y muchas otras cosas también.
Tuve muy pocos problemas para encontrar comida. Suelo ir a algún sitio basándome en una sugerencia de Internet o de mi libro, o simplemente deambulo por una zona mirando escaparates y menús. Algunos restaurantes tienen modelos de su comida en el escaparate. Otros simplemente tienen un menú colgado en algún sitio. Yo también entraría y pediría (en inglés, ya que no hablo japonés) que me enseñaran el menú; eso también te da la oportunidad de ver cómo es el ambiente y lo que comen los demás comensales. Obviamente, las cosas cambian entre la fecha de publicación o la reseña y tu visita, y es un poco molesto tener en mente visitar el restaurante A, sólo para descubrir que ya no existe o que es muy diferente a la impresión que te llevaste. Pero tener que cambiar de planes en el último momento puede formar parte de la diversión.
En cuanto a la conducción, me hago eco del comentario de zeocrash sobre el pase de tren JR. Aunque sólo está disponible fuera del país y luego hay que "validarlo" antes de poder empezar a utilizarlo, luego es muy fácil de usar. El sistema ferroviario japonés es amplio y muy fiable. Si va a alquilar un coche sólo para circular por Tokio (con peor tráfico que Londres/París), por Osaka y por la autopista directa que las une, deje que el tren y el transporte urbano hagan el viaje por usted. Si quieres ver el campo en detalle, entonces quizá alquiles un coche; necesitarás un permiso de conducir internacional y puedes pedir navegación GPS en inglés.
También he alquilado un coche (en Hokkaido) y me resultó mucho más fácil de lo que cabría suponer. La conducción es similar a la de Europa y vi partes a las que el tren no me permitía llegar. Muchas señales de tráfico están en inglés o es fácil entender su significado. La única queja que tuve fue el elevado coste de los peajes de las autopistas: sólo recorrí 350 km por las autopistas de Hokkaido y me costaron 8.000 yenes. Por supuesto, las carreteras rurales y urbanas son gratuitas.