En términos de seguridad, probablemente nada especial que destacar, excepto:
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Evite las zonas donde se celebren manifestaciones. Desgraciadamente, siempre hay algunos individuos sobreexcitados que se hacen los tontos con la policía, y ésta reacciona un poco rápido hoy en día.
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Hay montones de bicicletas, patinetes y otros dispositivos de movilidad por todas partes, incluso en las aceras, donde supuestamente ya no están permitidos. Mantén los ojos bien abiertos.
En cuanto a los suministros, yo no me preocuparía. Sí, hay mucho tráfico y, por tanto, las entregas son más difíciles de lo habitual, pero tampoco es que sea un asedio.
Los hoteles y restaurantes están más preocupados por el hecho de que haya menos clientes, ya que la gente evita París durante la huelga, que por la falta de personal o de suministros, por lo que yo sé.
Sin embargo, en términos de transporte, puede ser bastante difícil.
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Las líneas 1 y 14 de metro (totalmente automatizadas) funcionan todos los días desde el inicio de la huelga, aunque pueden estar muy, muy, muy concurridas en las horas punta.
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Las líneas 4 y 7 han circulado habitualmente con servicio reducido y paradas limitadas durante las horas punta. De nuevo, pueden estar muy, muy, muy concurridas.
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Hay segmentos de otras líneas (las partes orientales de las líneas 8 y 9, por ejemplo) que también han funcionado con servicio reducido. Ídem.
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Todas las demás líneas han tenido un servicio variable, desde ninguno en absoluto hasta un servicio limitado y reducido.
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Tenga en cuenta que el domingo pasado no hubo servicio de Metro, salvo las líneas 1 y 14.
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Las líneas de autobús y tranvía son bastante irregulares. Algunas funcionan (normalmente con servicio limitado), otras no. Puede ver un autobús lleno hasta los topes y el siguiente estará casi vacío. Necesitará bastante paciencia.
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El tráfico es malo para los coches y los servicios tipo Uber. Los taxis disfrutan de carriles bus que, al haber menos autobuses, pueden ser bastante fáciles de transitar a veces, excepto al cruzar otra calle.
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La situación del RER es similar a la del metro.
Así que todo depende de dónde se aloje, adónde quiera ir y de si tiene aversión a caminar. Si se aloja en un hotel cercano a las líneas 1 ó 14 (idealmente a ambas) y evita las horas punta, podrá desplazarse con relativa facilidad a todos los lugares de París a los que llegan, como los Campos Elíseos, el Arco del Triunfo, el Grand Palais, la Plaza de la Concordia, las Tullerías, el Louvre, la Bastilla, los grandes almacenes Printemps Haussmann y las Galerías Lafayette, la Isla de la Cité (Notre Dame, lo que queda de ella), la Isla de San Luis, el Marais... El Barrio Latino tampoco está lejos.
Para llegar a la Torre Eiffel es probable que tenga que caminar un poco, pero es llano (desde Franklin D. Roosevelt) o cuesta abajo (desde Charles de Gaulle-Etoile, que es la mejor aproximación, vaya hacia Trocadero por la avenida Kleber).
Para llegar a Montmartre hay que caminar un poco, y es cuesta arriba (bastante empinada). Para ello, es mejor coger un taxi.
Para ir y volver de aeropuertos y estaciones de tren, los taxis son la mejor opción por el momento, aunque prevea mucho margen, puede tardar en conseguir uno, y en algunas zonas sin carril bus, están atascados como el resto.
Pero olvídese del Castillo de Versalles.
Si ha reservado hotel en otro lugar, vea si puede cancelarlo y volver a reservar más cerca de las líneas 1 y 14. Como tienen muchas cancelaciones, puede que haya bastantes buenas ofertas disponibles.
Hay que tener en cuenta que la huelga podría detenerse en cualquier momento, o suspenderse durante las vacaciones de Navidad (aunque es más probable que esto ocurra con los trenes de larga distancia que con el transporte público en París).
Tenga en cuenta que, aunque el tráfico de trenes de larga distancia es limitado, hay trenes que circulan hacia muchos lugares (y aún hay plazas disponibles en muchos de ellos), y muchas ciudades no se ven afectadas por las huelgas de transporte público, por lo que es muy posible que venga a Francia y decida visitar otra ciudad o ciudades. Sin embargo, es un poco difícil planificarlo, ya que es complicado saber qué trenes funcionarán o no con más de un par de días de antelación.
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"¿Debería cancelarlo?" se basa en opiniones, así que no podemos responder a esta pregunta por ti. El transporte público es un desastre, pero la ciudad aún no se ha hundido. No he oído que ningún restaurante se haya quedado sin comida.