La sobreestadía de su marido infringió las condiciones de su permiso de entrada en el Reino Unido, aunque se marchó voluntariamente tras el inicio de los procedimientos de expulsión. La documentación que recibió habría indicado la prohibición de reingreso aplicable tras la salida voluntaria (un año, 2 años o 5 años); serían 10 años tras la expulsión forzosa o la deportación.
Ciertamente puede solicitar un permiso de entrada en el Reino Unido, y debería hacerlo. Aunque normalmente un nacional sin visado no necesita un permiso previo para entrar en el Reino Unido, sería aconsejable hacerlo con estos antecedentes de inmigración.
Entienda que su infracción y expulsión forman parte de su expediente, de forma permanente, y que se tendrán en cuenta cuando solicite que se le permita regresar al Reino Unido. Como advertencia, si actualmente tiene prohibida la reentrada, puede ser imprudente solicitarla en este momento, ya que una denegación podría invocar una extensión de la prohibición actual, o algo peor.