Tienes un malentendido fundamental sobre el funcionamiento de todo esto.
El chip de un pasaporte electrónico contiene información sobre usted y su pasaporte. En su mayor parte es la misma información que aparece en la página de datos personales del pasaporte (nombres, lugar y fecha de nacimiento, nacionalidad, lugar y fecha de expedición, fecha de caducidad ), junto con algunos datos biométricos opcionales, que pueden ser huellas dactilares o una foto (u otros datos que permitan el reconocimiento facial, según parece). Lo más importante es que también contiene el número de pasaporte.
Tenga en cuenta que los datos del chip pueden estar protegidos, con varios niveles de protección. Los datos básicos suelen estar protegidos mediante una clave basada en el contenido de la MRZ (la zona legible por máquina, las dos líneas de la parte inferior de la biopágina, que se lee mediante OCR), que garantiza que sólo un lector que pueda ver la biopágina pueda hablar de forma inalámbrica con el chip. Los datos biométricos suelen estar protegidos además con una clave que debe intercambiarse entre el emisor del pasaporte y cada país que quiera utilizarlo.
Las puertas electrónicas están ahí para verificar:
- que tiene un pasaporte válido
- que usted es la persona para la que se ha expedido el pasaporte (véase más abajo)
- que se le permite entrar (ver más abajo)
- que no está en una lista de personas que necesitan un "tratamiento especial" (buscados por la policía, etc.)
Para comprobar que usted es la persona correcta, la puerta electrónica tiene que ser capaz de obtener sus datos biométricos y compararlos con los del chip. Esto plantea un primer problema, ya que no todos los pasaportes contienen los mismos datos y no todas las puertas tienen todos los lectores. Si la puerta sólo puede hacer un reconocimiento facial mientras el pasaporte sólo contiene huellas dactilares, o viceversa, no funcionará. Algunos pasaportes electrónicos no contienen ningún dato biométrico, o datos que sólo son reconocidos por las puertas del mismo país. Y, como ya se ha dicho, cada país necesita obtener las claves de cada uno de los otros países que quiere reconocer para leer los datos pertinentes.
Una vez que la puerta sabe quién es usted, puede intentar determinar si se le debe dejar pasar. Los dos casos más comunes son que no necesites ningún visado (eres ciudadano o residente permanente del país, o vienes de un país cuyos ciudadanos no necesitan visado para entrar en él), o que tengas un visado para el país.
Para este último caso, no es necesario que el visado esté almacenado en el chip del pasaporte (en realidad, no puede). El portal lee el número de pasaporte (y el resto de tus datos) y busca en la base de datos del país al que llegas para ver si el visado está allí (la mayoría de los países no se preocupan de los visados de otros países, sólo de los que ellos emiten, que (deberían) conocer, no hace falta ninguna base de datos centralizada).
Además, hay muchos casos en los que no funciona. Muchos países pueden tener procedimientos especiales para la primera visita con un visado (especialmente los de larga duración). Puede que no confíen en las personas de ciertos países incluso con un visado. Puede que no tengan puertas compatibles, que no tengan las llaves, etc.
Sólo como ejemplo, en Francia la primera generación de pasaportes electrónicos no contenía los mismos datos biométricos que los posteriores. Esto hace que los pasaportes más antiguos no puedan utilizarse en las actuales puertas electrónicas francesas.