Tengo previsto visitar España, pero la última vez que fui al espacio Schengen tuve algunos problemas. La embajada suiza me expidió un visado de entrada única. La agente que ayudó a mi familia a solicitar el visado no nos recordó que un visado de entrada única no era válido para Croacia, a pesar de que le dimos nuestro itinerario. Cuando intentamos entrar en Croacia, los guardias fronterizos nos dijeron que no era válido y que debíamos volver a Liubliana y solicitarlo. Abajo está mi sello de salida de Eslovenia, anulado debido al error del visado. Cuando salimos del espacio Schengen y continuamos nuestro vuelo a Singapur, ninguno de los funcionarios de inmigración del control de pasaportes nos hizo una sola pregunta.
Cuando tomé un vuelo de Liubliana a Ámsterdam y luego de Ámsterdam a Atenas, algunas azafatas me preguntaron si tenía visado. Supongo que se trata de una advertencia del sistema de información Schengen. Me preocupa que me incluyan en la lista negra del espacio Schengen y de Croacia, ya que Croacia es un miembro próximo del espacio Schengen. Todavía no he presentado la solicitud. He leído un blog en el que al autor se le denegaba la entrada por quedarse más tiempo del permitido. En mi caso, nunca me he quedado más de la cuenta en ningún país. ¿Podría tener una denegación de entrada en mi próximo viaje a Europa y solicitud de visado? Ninguno de los funcionarios croatas estampó un sello de denegación de entrada o de salida con cuatro líneas.
¿Estoy en la lista negra o incluso tengo prohibida la entrada al espacio Schengen? Ten en cuenta que cuando salí del espacio Schengen por Suiza (el país que me expidió el visado de entrada única y mi último destino en el viaje del año pasado), el funcionario del control de pasaportes no dijo ni una palabra. Se limitó a sellarnos la salida y a sonreír.
Aquí está la cancelación del sello de salida de Eslovenia, además observe que no había ninguna carta o sello de la frontera croata. El inspector de fronteras incluso nos pidió disculpas y nos dijo que si queríamos volver, teníamos que pedir un visado a su embajada en Liubliana o ir en otra ocasión. El guardia fronterizo esloveno se limitó a anular nuestro sello de salida y pidió al conductor del autobús que nos dejara en la estación de autobuses más cercana, y nos dio un número de taxi para que nos dejara en la estación de tren más cercana para volver a Liubliana.
