De hecho, el senderismo en Rusia es absolutamente legal. No hay tantos territorios prohibidos. Suele tratarse de una zona de 5 kilómetros desde la frontera estatal. Para visitarla, hay que pedir permiso al servicio de fronteras. Además, hay muchas zonas naturales protegidas o reservas. Se necesita un permiso especial para visitarlas, pero creo que es típico de cualquier país. Hay un par de docenas de ciudades estratégicas cerradas (normalmente se trata de pequeños pueblos con instalaciones nucleares), la entrada allí también requiere permiso. El temor a que las autoridades presten más atención a los extranjeros es una exageración. Hay varios extranjeros trabajando en nuestro laboratorio y nunca han sido parados por la policía con ninguna pregunta en todos los años de trabajo. El mayor peligro en Rusia son los factores naturales. El vasto territorio y la lejanía de la mayoría de las rutas a menudo no permiten evacuar rápidamente a los turistas en caso de problemas. Además, el número de osos pardos ha aumentado drásticamente en Siberia en la última década. Todos los años se producen ataques de osos a seres humanos. Es difícil aconsejar algo en caso de encuentro con un oso... En cualquier caso, es una buena práctica llevar un teléfono por satélite durante la ruta. Además, es necesario notificar al servicio de rescate del Ministerio de Situaciones de Emergencia sus planes de viaje y el horario de la ruta.
En verano, cuando los incendios arrasan la taiga siberiana, las autoridades pueden imponer restricciones para visitar los bosques. En esta época es mejor abstenerse de hacer senderismo y, sobre todo, de hacer hogueras. Ha habido casos en los que cientos de miles de hectáreas de bosque se quemaron en la taiga por descuido de los turistas.
Además, hay que tener en cuenta que la tasa de delincuencia en Rusia no ha dejado de disminuir en los últimos 15 años. Ahora, incluso las repúblicas del Cáucaso Norte son seguras para los turistas. Por ejemplo, Chechenia es una de las regiones más seguras del país, donde la delincuencia ha disminuido muchas veces, y las bandas de militantes islámicos desaparecieron hace tiempo. El año pasado visité las regiones montañosas de Kabardino-Balkaria, Daguestán y Chechenia y no encontré ni el menor atisbo de peligro. Sin embargo, hay territorios donde puedes encontrarte con problemas. Por ejemplo, la República de Tuva. Hay algunas características regionales que conviene estudiar antes de ir allí.