La Cueva de Hielo del Dachstein es realmente espectacular y ofrece una experiencia única. Sin embargo, la visita a la cueva requiere cierta forma física, ya que implica un viaje en teleférico y una empinada caminata, además de escalones que subir. La visita completa, incluyendo el viaje en teleférico y la caminata de ida y vuelta, puede durar entre 2 y 3 horas.
Si tus padres suelen estar en forma, pero tu madre tiene problemas para subir escaleras largas, quizá debas tenerlo en cuenta. El camino hasta la cueva es empinado y también hay escaleras en su interior. Algunos visitantes han señalado que la visita puede ser apresurada y no dejar mucho tiempo a quienes prefieren ir más despacio.
Sin embargo, la zona de Dachstein no es sólo la cueva de hielo. Ofrece impresionantes vistas de las montañas y valles circundantes, y hay otras atracciones como el Dachstein Skywalk, una plataforma que ofrece vistas panorámicas de los Alpes.
En comparación, la cueva de Eisriesenwelt, en Werfen, es la mayor cueva de hielo del mundo e implica una importante escalada (unos 700 escalones). Así que si le preocupan las escaleras, Dachstein puede ser la opción más fácil.