La gran obviedad que se echa en falta es un guía turístico.
Pero tú y yo pensamos muy parecido. Cuando viajo, me gusta ahorrar en visitas guiadas de pago utilizando podcasts de audioguías (o podwalks), así que inmediatamente comprobé mis diversas aplicaciones de audioguías y marcadores de podcasts, ¡y estás de suerte! Estás en el lugar correcto, porque Copenhague X realmente afirma tener inventó el término "podwalk".
Hay una excelente Recorrido en varias partes del Harbor Bus de Copenhague disponible en forma de podwalk en el Centro Danés de Arquitectura. También me gustaría ver el Su puerto introducción al puerto y a los nuevos puentes que lo rodean.
Puede descargar todos los podwalks desde el sitio web del Centro, pero también están en iTunes que puede facilitar su introducción en el teléfono o en el reproductor multimedia.
Diviértete.
A petición del cartel, aquí hay unas palabras sobre cómo manejar las cosas que podría perderse frente a una excursión en barco por los canales de pago. Mi respuesta es más filosófica que técnica: simplemente no te preocupes.
Complementa el viaje en autobús por el puerto con una visita a pie, como el tour gratuito de Sandemans New Europe, que me ha parecido de buena calidad en las numerosas ciudades europeas en las que lo he realizado: una forma estupenda de orientarse en una ciudad. Luego, confíe en que si hay algo realmente imperdible, un local o un compañero de viaje en el recorrido a pie se lo hará saber enseguida. Eso suele ocurrir en todos los lugares a los que voy. Es difícil no para conocer los mejores lugares: en Estocolmo, incluso los lugareños alaban y recomiendan repetidamente el Museo Vasa; en Riga, fue el precioso enclave Art Nouveau "The Quiet Center" en torno a la calle Elizabetes.
Sin duda, sería posible rastrear todos los lugares visitados por una ruta típica de barcos del canal y compararlos con el mapa de Havnebus para elaborar un plan estratégico que permitiera rellenar todos los huecos. Pero, a menudo, este tipo de planificación de tipo militar desbarata la oportunidad de las coincidencias serendípicas. Mi experiencia me dice que si dejas algunos huecos en tu plan, invariablemente se llenarán con aventuras más ricas que las que habrías tenido si hubieras microgestionado cada detalle.
Así que mi recomendación es la siguiente: llévate uno de esos pequeños boombox de teléfono que funcionan con pilas. Haz el recorrido a pie y haz algunos amigos por el camino. Invítalos a que te acompañen en el recorrido del Havnebus y a que escuchen los podcasts en el boombox. Después, ve al bar con tus nuevos amigos y pregúntales: "¿Alguien ha visto algo en Copenhague que considere imperdible? ¿O alguien tiene muchas ganas de ver algo que aún no hayamos visto?". Deja que sus respuestas te sirvan de guía para saber qué hacer a continuación.
Lo pasarás de maravilla. No te perderás nada.