Si eres ciudadano de países como Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, Australia, Nueva Zelanda o países miembros de la UE, puedes optar a un sello de entrada de 30 días (también conocido como exención de visado). Para ello, es necesario 1) documentar que saldrá de Tailandia antes de que se cumplan los 30 días (reserva aérea confirmada); 2) demostrar la situación financiera (10.000 baht para una persona). La inmigración tailandesa rara vez comprueba estos dos requisitos, PERO puede hacerlo, ya que he sido testigo de que se lo han pedido. La aerolínea confirmará el primer punto antes de dejarte embarcar. Para permanecer más tiempo, se puede solicitar por adelantado un permiso de turista de 60 días.
Si es ciudadano de países como la India, puede solicitar un visado a la llegada que le proporciona 15 días. O puede solicitarlo por adelantado en la India y recibir un visado de 30 días.
Las exenciones de visado, los VOA y los visados de turista son todos de una sola entrada y caducan al salir, independientemente del número de días que haya utilizado. Los viajeros que reúnen los requisitos para la exención de visado pueden obtener un nuevo sello cada vez que entran, aunque los funcionarios de inmigración tienen ahora la facultad de denegar uno si consideran que se está abusando del sistema y permaneciendo demasiado tiempo en el país. Las personas que viajan con visado de turista tienen que tramitar varios visados para volver a entrar.
Las entradas sin visado y los visados de turista pueden prorrogarse una vez por 30 días una vez en Tailandia, pero esta posibilidad de prórroga no anula el requisito de demostrar que se sale antes del permiso inicial de 30 días.
Todas estas normas quedan a la discreción del funcionario de inmigración, que puede acortar su estancia permitida si lo considera justificado. Estas normas pueden cambiar sin previo aviso, ya que Tailandia ajusta con frecuencia sus normas para fomentar el turismo e intentar eliminar a los expatriados que pasan desapercibidos.