Recientemente se ha producido un restablecimiento pleno de las relaciones diplomáticas entre EE.UU. y Cuba, ¿significa eso que los ciudadanos estadounidenses pueden ir a Cuba libremente y viceversa?
Respuestas
¿Demasiados anuncios?No El viaje todavía no es totalmente gratuito. Sin embargo, ahora se le permite para viajar a Cuba y gastar dinero allí legalmente bajo las siguientes 12 categorías:
- visitas familiares
- asuntos oficiales del gobierno de Estados Unidos, de gobiernos extranjeros y de ciertas organizaciones intergubernamentales
- actividad periodística
- investigación profesional y encuentros profesionales
- actividades educativas
- actividades religiosas
- actuaciones públicas, clínicas, talleres, competiciones deportivas y de otro tipo, y exposiciones
- apoyo al pueblo cubano
- proyectos humanitarios
- actividades de fundaciones privadas o institutos de investigación o educación
- la exportación, importación o transmisión de información o materiales de información
- ciertas transacciones de exportación que pueden ser consideradas para su autorización en virtud de los reglamentos y directrices existentes.
Obsérvese la ausencia del simple "turismo" en esta lista. En la práctica, sin embargo, ya era bastante fácil visitar Cuba legalmente bajo la hoja de parra de los "intercambios entre personas", y con estas nuevas y amplias categorías, está a punto de se hace aún más fácil . (¿Una semana bailando salsa o probando puros? A mí me parece "educativo"). Es probable que tenga que recurrir a una agencia de viajes, a menos que tramitar las licencias con la Oficina de Control de Activos Extranjeros le parezca una buena idea.
En sentido estricto, la legislación estadounidense no prohíbe completamente viajar a Cuba. Incluso hay viajes organizados.
La principal restricción que impide viajar libremente a Cuba es el embargo que prohíbe a los ciudadanos estadounidenses realizar negocios o cualquier transacción monetaria con intereses cubanos. Dado que este embargo fue establecido por una serie de estatutos, el presidente no puede anularlo sin la ayuda del Congreso de EE.UU. y es poco probable que ocurra pronto.
Al mismo tiempo, existe un sistema de licencias autorizar a las personas a gastar dinero en Cuba para permitir los viajes con fines limitados. Al parecer, la actual presidencia de EE.UU. tiene la intención de facilitar ese proceso, por lo que, aunque los viajes no sean completamente libres, podrían ser más fáciles.