Vale la pena considerarlo. No existe algo perfectamente "seguro" en este sentido, sólo niveles de riesgo variables.
Normalmente, la aerolínea dejará el tiempo suficiente para que se pueda realizar el traslado, incluyendo el equipaje, etc, si el primer vuelo llega a tiempo y todo va según lo previsto. Pero no es una garantía. Si el primer vuelo se retrasa por cualquier motivo (lo cual es totalmente posible), es muy posible que se pierda la conexión. La aerolínea no promete retener el segundo vuelo ni nada parecido. Lo que sí promete es ponerle en el siguiente vuelo disponible a su destino. Pero si esos vuelos son poco frecuentes, o si están todos llenos, es posible que tenga que esperar bastante tiempo; no tendrá prioridad sobre los pasajeros con billete original en esos vuelos.
Dependiendo de la causa del retraso y de las leyes locales que rigen sus aeropuertos o aerolíneas, puede recibir dinero de compensación o el reembolso de sus comidas y alojamiento durante el retraso; o puede que no.
Así que depende de ti sopesar los riesgos y los beneficios. ¿Qué importancia tiene llegar a su destino con la menor escala posible (en el mejor de los casos)? ¿Cuánto más barato es este itinerario, comparado con otros con escalas más largas? ¿Qué inconveniente supondría perder la conexión? ¿A qué hora del día se realiza la conexión y cuántos vuelos más hay hacia el destino? ¿Con qué frecuencia se retrasa el primer vuelo? (Normalmente esta estadística está publicada en algún sitio).
Considere todos estos factores y luego decida si una conexión corta es un riesgo aceptable para usted. Ese es el único sentido de la palabra "seguro".